• Puebla de Montalbán       Mayo 2013

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La excursión a la Puebla de Montalbán, el lugar donde nació Fernando de Rojas autor de la Celestina, iba acompañada de una primera parada a Las Barrancas sobre el río Tajo, para luego terminar en la Ermita de Santa María de Melque

Como hemos dicho ,la primera parada  Las Barrancas es un paisaje singular por sus formas geológicas asi como por su diversidad de seres vivos, especialmente de aves. Por ello, es reconocido como espacio natural dentro de la Red Natura Europea 2000 

Allí pudimos disfrutar de un amplio valle producido por la erosión y sedimentación del río Tajo, que tiene las aguas retenidas por el embalse de Castrejón, asi como las cárcavas sobre el margen izquierdo del río con una tonalidad rojiza debida a las arcillas originado por aguas de arroyada sobre material blando

Con ayuda de nuestros prismáticos y un telecopio óptico, nos dedicamos a disfrutar del vuelo de las anátidas, cormoranes, cigüeñas, grajillas, alguna garza real y, con mucha imaginación la silueta de una águila-azor perdicera divisando su cazadero en lo alto de un pico.

Después de media hora de paseo, y comernos un bocata, nos fuimos al Museo de la Ceslestina en la localidad toledana de Puebla de Montalbán. Allí nos esperaban para darnos la información más relevante de la biografia de Fernado de Rojas y todo lo relativo a las ediciones de la Tragicomedia de Calisto y Melibea. Muy interesante desde el punto de vista literario y lleno de matices históricos de la época. 

Hay que destacar el trabajo formidable de nuestro alumnos que previamente Rosaura, profesora del Bachillerato, les había orientado en sus exposiciones sobre los aspectos más importantes del libro.

Más adelante, nos adentramos en los lugares más relevantes de la la localidad toledana. Primero , por las calles de las Brujas, que aún mantiene ese enigma por la angosta de sus calles y la arquitectura típica medieval.

Después , nos introducimos en las populares cuevas, que parece ser se utilizaban para comunicar casas en aquella época, y que actualmente son de propiedad privada con usos particulares como bodegas de vivo. Seguimos callejeando, casi con el estómago rugiendo de hambre, hasta la plaza Mayor y su iglesia de edad renancestista con un palacio adyacente.

Para terminar, reconociendo la Torre de la Iglesia donde se suicido Melibea asi como la estatua de Fernando de Rojas en una pequeña plazoleta.

Asi que comimos, y cogimos el bus hacia la Iglesia de Santa Maria de Melque, alejada de toda civilización, con un origen visigotico, árabe y después cristiano, representa muy bien lo que fue aquella época llena de continuos cambios

Un saludo

David Sanz Sanz